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Haider Ackermann: “Poned a mujeres como CEO porque en la moda todavía siguen reinando los hombres”

De origen colombiano, adoptado por una familia francesa –su padre era cartógrafo de Amnistía Internacional–, Haider Ackermann pasó su infancia en distintos países y fue absorbiendo posos culturales de alto voltaje que luego transportaría a la vestimenta. Se formó en la prestigiosa Real Academia de Bellas Artes de Amberes en 1994 y comenzó de auxiliar en el taller de John Galliano. Desde que lanzó su primera colección en el 2002, recibió los honores de las editoras de moda más prestigiosas. Suzy Menkes lo describió como una “rara esperanza para el futuro”. 

Cuenta con varios galardones, y las creaciones que elaboró con su propia firma –que por ahora no se produce– le valieron un cumplido tan halagador como venenoso: el de eterno sucesor de los grandes. De Saint Laurent, de Dior –renunció a trabajar para la firma, al igual que para Margiela– o de Chanel. Lagerfeld dejó dicho que sería un digno sucesor suyo en la mítica marca. Pero Ackermann se escondía de los focos y reivindicaba seriedad en el oficio e independencia. 

En los últimos años ha hecho colaboraciones breves con diferentes firmas de lujo, de Berluti a Fila. Este verano, ha firmado la colección de alta costura de Jean Paul Gaultier. Desde que se retiró de la primera línea, cada temporada seleccionan a un diseñador invitado. 

Conversamos a través de la pantalla, Haider viste de negro, lleva gafas redondas y ejerce de observador nato que sabe sostener la mirada.

¿Le sorprendió que le pidieran esta colaboración para Jean Paul Gaultier?

Por supuesto, porque no soy un creador joven, que es lo que tenía en mente que buscaban. Yo estoy establecido y hace tiempo que no creo nada. Me sentí muy honrado. Siempre he tenido esa relación de flirteo con la alta costura. Coincidió con que salía justo de un periodo difícil, más silencioso.

¿Cómo ha sido su relación con él?

Monsieur Gaultier es completamente lo opuesto a mí, una persona llena de alegría que ama a la gente. Yo soy mucho más introvertido, dado a esconderme. Pero compartimos una misma sensibilidad: amamos a las mujeres en todo su esplendor. Cuando le conocí, le pedí que cenáramos juntos, y esos encuentros siempre giraban en torno a la vida, el amor, la sexualidad, pero nunca el trabajo que estaba haciendo. Descubrió la colección al mismo tiempo que el resto del mundo, en la pasarela.

¿No siguió la evolución de las prendas?

Me dio total libertad para no condicionarme, un gesto de gran generosidad. En desfile, yo estaba en el backstage y tenía cuatro pantallas para seguirlo: una era para la salida de las modelos, otra para la pasarela, otra para la entrada y finalmente una exclusiva para ver la reacción de Jean Paul, y yo solo estaba pendiente de la última.

¿Le resulta complicado formar parte de la parafernalia que entraña la moda?

Podríamos decir que sí. Me gusta la discreción, me ayuda, me sirve y me protege. Nunca he querido ser un personaje que estuviese en primer plano, prefiero estar atrás. Además, en este mundillo hay mucha gente que ya habla muy alto.

Me gusta la discreción, me ayuda, me sirve y me protege”

El mundo de las ‘celebrities’, los embajadores de marca, ‘influencers’ parece un oficio distinto.

Sí, claro. En el juego de las celebridades y las grandes casas todos buscan más likes en Instagram. No me interesa. La fidelidad que mademoiselle Swinton tiene conmigo y la amistad que compartimos es lo que verdaderamente me honra, está basado en algo mucho más puro. Eso es el lujo.

La palabra puro o pureza siempre está presente en su discurso.

Pues claro, si queremos formar parte de la historia creo que eso es lo único que importa. Ser honesto y fiel.

¿Qué piensa del impacto del feminismo en la moda de hoy?

Es una pregunta bastante complicada de responder. Reivindicar el feminismo diciendo “soy feminista, que fuerte soy, soy feminista” no me interesa. Pienso que los creadores somos aquellos que amamos a las mujeres (espero), y alguien como Miuccia Prada no grita “soy feminista” si no que lo enseña. Se puede hacer sin gritarlo a pleno pulmón. Prefiero que en vez de gritar actuemos. Poned a mujeres en posiciones de poder, poned a mujeres como CEO porque en la moda todavía siguen reinando los hombres. Parad de hacer camisetas con “soy feminista” y haced CEO a esa mujer. La moda ama los eslóganes, pero si eres verdaderamente feminista, viste a las mujeres para favorecerlas, amóldate a sus cuerpos y que no se tengan que amoldar ellas a prendas incómodas. Dejad de hacer campañas de publicidad de chicas de dieciocho años y decir que sois feministas. Si sois feministas, incluid en esas campañas a todo tipo de mujeres.

La moda ama los eslóganes, pero si eres verdaderamente feminista, viste a las mujeres para favorecerlas, amóldate a sus cuerpos”

¿Cómo va de paz mental?

A raíz del desfile de Jean Paul Gaultier, comenzaron a salir muchos artículos y reviews. Decidí irme con mis amigos al campo. Teníamos una casa con tres chimeneas, las encendíamos y cocinábamos juntos. Desconecté de mi teléfono durante tres días, estuve leyendo con mis amigos, nos íbamos a caminar por los bosques y por las noches bailábamos frente al fuego de las chimeneas. Fue verdaderamente hermoso, un lujo. Una vez más, el lujo de las amistades prima sobre todo.

La amistad para usted es verdaderamente importante por lo que veo.

Primordialmente sí, porque en este mundo que juega mucho con nuestra sensibilidad, hay momentos en los que pierdes la confianza sobre ti mismo, pero siempre estarán tus amigos que te mantendrán firme, y es importante hablar a la gente joven que no se puede hacer una colección tu solo, es imposible, necesitas a un equipo a tu vera y juntos hacéis el trabajo. Es verdad que luego estará firmado con mi nombre, pero siempre habrá ese equipo de realización detrás y mis amistades fieles que me apoyan. Son las que te dan fuerzas y te proporcionan ese amor para continuar.

¿Tiene hoy en día algún tipo de arte que le inspire lejos de Occidente?

Siempre. Estoy desando poder irme de viaje. Parecerá raro, pero cuando fui a visitar Bután con Tilda, ves a las mujeres vestidas de una manera diferente, mezclan los cuadrados con el terciopelo, con las sedas; se trata de un estilismo sublime, y lo hacen de manera inconsciente, natural y grácil. Todo eso es aprender. Sueño con volver a Etiopía, donde vivía cuando era pequeño, para visitar a los hombres envueltos en velos de algodón. Podemos observar aprendiendo y aprender observando las otras culturas. Es muy enriquecedor.

¿Cuáles son las cosas que le preocupan ahora mismo en el mundo?

La libertad para todas y cada una de las personas del planeta. Lo que están pasando ahora mismo en Irán, es devastador. Que jóvenes de veintisiete años son ejecutados… Estamos en 2023 y que el resto del mundo no reaccione, me parece increíble y difícil de aceptar. Claro que hay muchos otros problemas y sucesos, pero que te nieguen la libertad personal y que haya estados que hagan esto y sigan teniendo ese poder, me parece alarmante.

No podía sublimar la figura de la mujer sin hablar de la mujer iraní y de lo que estaban (y están) sufriendo”

En su forma de entender la moda pervive una ambición cultural y social.

Solo se puede hacer una colección actual si se mira lo que está pasando alrededor. No podía sublimar la figura de la mujer sin hablar de la mujer iraní y de lo que estaban (y están) sufriendo. No tiene nada que ver con un acto político, simplemente es un acto humano. La moda sirve para comunicar lo que pasa en el mundo.

¿Cómo ha influido tener una familia interracial y solidaria?

Si me he preocupado de Irán o Afganistán responde a la educación que he tenido. Es el eco de mis padres sobre mí hablando de casos de personas que me emocionan. Para mi padre, al principio fue complicado ver cómo invertía tanto dinero en un desfile mientras en África hay gente que necesita ayuda, incluso en las calles de París. En ocasiones nos sentimos culpables, pero cada uno tiene su trabajo y mi padre se dedicaba a los derechos humanos en el sentido más noble y católico de ayudar al prójimo. También necesitamos a gente que busque la belleza: algo que nos ayude a levantarnos por las mañanas, porque sin belleza no podemos vivir.

¿Ha pensado volver a hacer una colección propia?

¡Quién sabe…!

Entrevista publicada en La Vanguardia el 21 de agosto de 2023

Publicado en Entrevistas Magazine La Vanguardia

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