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La política no es para nenazas

A propósito de la información revelada por Wikileaks que pone de manifiesto que la práctica de la mentira y la simulación es consustancial a las democracias no sólo como estrategia para pacificar el mundo sino como táctica para manejar los hilos del poder, releo una reflexión de J. M. Coetzee en su libro Diario de un mal año. Escribía sobre Blair y aseguraba que los hombres como él sostenían que la política no es para nenazas: «Entendiendo por tales a quienes son reacios a comprometer los principios morales. Dicen que por su propia naturaleza la política es incompatible con la verdad…». La política, entendida como el arte de lo posible, decidida a sostener dobles discursos e interesados relatos como la utilidad de la guerra de Afganistán.

Algunos insisten en despreciar el Cablegate, aunque los documentos estén contrastados. En quedarse con el chascarrillo y la intrahistoria de la diplomacia. Pero eso no es lo sustancial, sino el desbloqueo de la información amordazada, de la nota de prensa hueca o las comparecencias sin turno de preguntas. Detrás de Wikileaks, que supone un antes y un después en los flujos de información privilegiada, hay un hombre inquietante que recuerda a aquel personaje creado en los años 20 por la Metro Goldwyn Mayer para Erich Von Stroheim, especializado en dar vida a perversos oficiales prusianos entre las dos guerras mundiales. Su cometido era el de encarnar al «hombre al que usted le gustaría odiar». Así presentan ahora a Assange en EE.UU., un personaje abominable para más del 59% de sus ciudadanos. Las pesquisas sobre su alambicado proceso judicial han permitido que el mundo haya conocido la legislación sueca sobre ética sexual, según la cual el Estado puede intervenir en las alcobas donde se practica sexo consentido para juzgar la subjetividad del deseo y su irracionalidad. El amante con su deseo insomne. Esa torpe insistencia, la irresponsable relación de algunos hombres con el preservativo. Libertad bajo fianza para un hacker promiscuo procesado por sus apasionadas fornicaciones que ya habían sido archivadas, pero que, coincidiendo con la filtración de los secretos de Estado, se han reabierto.

Quienes lo conocen dicen que tiene una voz grave y un espíritu nómada, así como una biografía de alto voltaje: estudió en más de treinta colegios diferentes, huyó de un padrastro metido en una secta, fue padre a los dieciocho y pasó casi una década peleando por la custodia de su hijo. Autodidacta, encanecido precozmente, aún no ha llegado a los cuarenta y ya ha revolucionado el making off de la información. Algunos sostienen que Wikileaks nació como movimiento civil y ahora se ha convertido en el show de Julian Assange. Pero mientras, su caja electrónica sigue supurando scoops además de desvelar desde qué punto de vista una parte del mundo etiqueta a la otra.

La Vanguardia

Publicado en Artículos

3 comentarios

  1. E E

    Gracias a los cables se está demostrando lo que ya se sabía, el trabajo “real” de los políticos del mundo occidental independientemente de sus filiaciones políticas: al servicio de las grandes corporaciones, directa o indirectamente (que hasta ahora, fácilmente se calificaban de “falsas teorías conspiradoras”).

    A parte, nos demuestra la grandeza de internet y el hecho que por mucho que ahora saquen leyes “contra la neutralidad de la red” o “contra el circulación de contenidos” será imposible pararlo.

  2. MARTIN GUEVARA MARTIN GUEVARA

    Sinde al servicio de los más perverso del imperio, el querido Zapa, sic, y toda la maquinaria administrativa de occidente. Kién se asombra y por qué?. Esa era la cuestión.
    Desde las ventanas coquetas de un pub de Swansea, donde uno de los ilustres habitúes era Dylan Thomas, y el resto, eran, cada ignoto beodo que consiguiese salir en línea recta del recinto, se pueden apreciar, que las hermosas galesas que divierten el paseo desde allí a Quenn’s bays, son del mismo fenotipo de Zeta Jones. Algunas pasean observando el oleaje o las puestas de sol, otras de vez en cuando echan una mirada al pub, y dan a Dylan, cronologías al margen, un motivo más para sus versos. La mayoría, caminan escondiendo el semblante en preocupaciones inmediatas, urgentes, como que sus esposos han perdido el trabajo, lo cual perciben de peor humor que si hubiesen sido abandonadas por ellos.
    Assange nos dice que la protagonista de el zorro, no es una bella mexicana sino una atribulada galesa, de las que hay en Swansea cientos.
    No viajemos ahora a Cardiff a buscar a el zorro. Que también era un galés en la misma película.
    Ese pub de Swansea tiene trecientos años., Nuestra inocencia, que parecía ser milenaria, sufrió su último infarto, y es repentinamente suplantada, por la sensación de haber sido abandonados en este sketch, y nosotros colocados en la desprotección que nos teníamos merecidos.

  3. entiendo el mosqueo de los yankis. Si los cables hubieran sido los de los embajadores españoles, … a lo mejor también habría cabreo aquí. Bueno, o cachondeo. Imagina el contenido: “nena, manda dos paletillas ibéricas por valija, anda. Ah, y engorda unos 200 pavos la factura, que paga la embajada”.

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